Los Bancos de Alimentos prevén un repunte del 20 por ciento en la demanda de ayuda durante 2022 debido a la inflación y el conflicto bélico en Ucrania
De acuerdo a las previsiones para este año de la Federación Española de Bancos de Alimentos (FESBAL). Durante el pasado 2021, más de 64.888 personas de Castilla y León acudieron a esta entidad para pedir ayuda y se prevé que la cifra vuelva a crecer durante el 2022.
Así lo afirmó hoy CaixaBank a través de un comunicado en el que Fesbal alerta de un “nuevo escenario de emergencia social: la escalada de los precios se ha solapado con la pandemia y está cronificando la situación de pobreza alimentaria que ya sufrían muchas personas en España”. En este sentido explican que la cifra se mantiene cerca de los 1,5 millones de usuarios que se registraron en 2021.
Además, aclaran que la nueva crisis no solo está afectando a miles de ciudadanos en situación de vulnerabilidad, también a los propios Bancos de Alimentos de todo el país y a las entidades sociales encargadas de repartir comida en los barrios. Por culpa de la subida de precios, cada vez reciben menos donativos y excedentes para abastecer sus almacenes de provisiones y han tenido que reducir más de un 10 % la cantidad de alimentos que distribuyen. También les ha afectado el retraso en la llegada de los fondos europeos para entidades previstos para 2022.
Crisis encadenadas: de la pandemia
Tras dos años de emergencia social derivada de la COVID-19, en los últimos meses se ha producido un aumento generalizado de los precios y una gran pérdida de poder adquisitivo para muchas familias.
El dato continúa encendiendo las alarmas pese a ser ligeramente inferior al de marzo, cuando se alcanzó un 9,8 por ciento tras 13 meses de escalada ininterrumpida. En esta misma línea, según un informe de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) publicado a principios de abril, cinco de cada seis productos del supermercado salen más caros que hace un año, y el coste de la cesta de la compra ha subido un diez por ciento respecto a 2021. De seguir así, explica la OCU, en 2022 cada hogar gastará 500 euros más solo en alimentos básicos.
Ante este contexto de alta inflación, desde FESBAL alertan de que muchos de los nuevos usuarios que necesitarán ayuda alimentaria en los próximos meses “serán personas con trabajo y familias de rentas bajas y medias que ya no llegan a fin de mes por culpa de la subida de los precios”. También esperan atender a muchos de los refugiados ucranianos que han llegado a España por culpa del conflicto bélico en su país.
Campaña ‘Ningún Hogar sin Alimentos
Ante esta situación de emergencia , y con el objetivo de hacer frente a la misma, la Fundación ‘la Caixa’ y CaixaBank impulsan la tercera edición de la campaña solidaria ‘Ningún Hogar Sin Alimentos’. Esta iniciativa recaudó un total de 5,5 millones de euros entre los años 2020 y 2021, marcados por un aumento en la demanda de ayuda alimentaria del 50 por ciento debido a la pandemia. En Castilla y León, durante esos años se recaudaron 206.005 euros en favor de los Bancos de Alimentos. Gracias a esos donativos se consiguieron 5.986 toneladas de alimentos básicos que fueron distribuidos entre los 54 Bancos de Alimentos asociados a FESBAL, para que llegaran a las personas que más lo necesitaban, a través de casi 9.000 entidades sociales colaboradoras.